miércoles, 23 de octubre de 2013

Mar de Diversidad

Llegar a un país desconocido, implica la necesidad de conocer a  nuevas personas 
En este caso, eso partió por la convivencia en el que es mi hogar durante esta estadía: Casa Río Grande
Durante este ciclo, en esta casa vivimos: 2 chilenas, 4 alemanes, 1 español, 2 franceses y 1 estadounidense, cada cuál con sus costumbres, con su modo de ser, con su carácter: únicos!
El intercambio cultural que nos ha permitido el vivir en esta casa es magnífico, conocer palabras en diversos idiomas, comidas, y costumbres de gente tan diversa entre sí nos ha hecho expandir nuestra mente hacía nuevos modos de vida.
Sin embargo el conocimiento de nuevas personas no se ha agotado en la Casa Río Grande, la Universidad es un Caldo de Cultivo de nuevas amistades, pese a que para los estudiantes de Intercambio es mucho más fácil hacer amigos del mismo programa, siempre  esta la posibilidad de hacer amigos peruanos, lo cuál permite conocer mucho más a fondo el país y su cultura.

No olvidaré nunca la celebración sorpresa de mi cumpleaños en la Casa Rio Grande en donde me cantaron el "Cumpleaños Feliz" en 4 idiomas: español, Inglés, Francés y Alemán

La Vida académica: PUCP

Durante esos primeros días fui a visitar la Universidad de destino de mi intercambio: La Pontificia Universidad Católica de Perú.
Para mi sorpresa, la Universidad es un campus gigante, mucho más grande de lo que uno se puede imaginar al observarlo por Internet, una verdadera ciudadela, con Banco y decenas de restaurantes allí adentro.
Las áreas verdes priman entre edificios sencillos, sin embargo lo más curioso son los venados y las ardillas que cotidianamente deambulan por el campus.
La vida Universitaria de la PUCP  es excepcional, entre los jueves culturales en donde las clases están prohibidas para que desarrollen una serie de manifestaciones culturales organizadas por los estudiantes, o las decenas de talles, coloquios, debates, charlas, actividades deportivas y artísticas....uno no sabe que elegir, que hacer.


Otra cosa fundamental son los almuerzos, por 3,50  soles te comes un menú completo una vez que te entregan tu tarjeta de estudiante, eso equivale a unos 700 pesos chilenos, e incluso puedes comer por menos dinero, la variedad de comida es bastante buena, lo único malo son las filas que debes hacer....lo bueno, avanzan rápido.



Quizás lo único lamentable de la Universidad, es que el día en que se toman los cursos, hay que madrugar y hacer filas enormes, ya que los cursos no se toman "on-line", sino que de forma presencial, en un trámite largo y agotador que te lleva medio día o más. El otro punto débil es que a la PUCP  no puede entrar cualquier persona y cada vez que entres debes mostrar tu carnet de la universidad.


Pero lo que nadie puede negar es la calidad y calidez de sus docentes: siempre puntuales, bien preparados y dispuestos a ayudar a cada uno de sus estudiantes.

Llegada a Lima-Perú

Luego de un año de trámites, de entrevistas, de test Psicológicos y de una espera que se hizo larga
Y de dos meses en que sólo esperaba descontar pronto cada día del calendario...
Llegué a Perú, una tibia noche, el avión aterrizó en Lima!

Me fueron a recibir los dueños de la Casa de estudiantes en donde viviría la estadía de mi intercambio: Medardo y Monique, dueños "Río Grande" (Nombre que recibe la casa de estudiantes de Intercambio)
Durante el camino, no hice más que mirar curiosa el paisaje urbano, que no me sorprendió, pues como toda capital  es muy similar a cualquier otra.

Los días posteriores harían cambiar aquella primera visión, el centro histórico de Lima, con sus balcones y grandes construcciones coloniales, me harían pensar el haber retrocedido en el tiempo varios siglos antes.

Los meses posteriores me demostrarían también que si Lima es una ciudad hermosa, a veces, sólo a veces el color gris constante de su cielo en el invierno te hace pensar en huir de ella y de ir a conocer los magníficos paisajes que están dispersos por todo el territorio peruano.

Perú es un país que no para de sorprenderte: sus paisajes, su gente, su historia, su gastronomía, sus colores, su diversidad única.